jueves, 18 de junio de 2009

Córdoba celebra el 25 aniversario de la educación de adultos en Andalucía

Jornadas, exposiciones, recitales y conciertos llenarán desde hoy y hasta el próximo viernes la agenda cultural de la capital cordobesa para conmemorar los 25 años que cumple el Programa de Educación de Adultos en Andalucía (PEA), que hoy recibe el nombre de Educación Permanente.

Sobre el presente, el pasado y el futuro de estas enseñanzas, se profundizará con un programa que arranca hoy a través de unas jornadas de formación para el profesorado en el CEP Luisa Revuelta, a las que acudirán ponentes de todos los escalafones de la comunidad educativa y serán inauguradas por la delegada de Educación, Antonia Reyes Silas. Asimismo, el Patio Barroco de la Diputación Provincial acogerá la exposición fotográfica Nuestra historia en imágenes .

La comisión organizadora de este encuentro está formada por los docentes Dolores Relaño, Natalio Aguilera y Antonio Bujalance, quienes han conseguido reunir para la celebración a las instituciones que han querido homenajear y estar presentes en este aniversario. No obstante, según explicó la delegada de Educación, Antonia Reyes, durante la presentación del encuentro, esta unión no ha llegado aún al plano formal, pues todavía no se ha firmado el convenio entre la Administración autonómica y el Ayuntamiento para la gestión de los centros de adultos que modificará su funcionamiento de acuerdo con la nueva ley, ya que desde 2005 no se ha adaptado el convenio suscrito en 1991 con la Consejería de Educación a la ley general de Subvenciones. Siendo así la única provincia andaluza que no lo ha firmado.

Por otra parte, la Diputación Provincial colaborará con la organización de estas jornadas con la edición de un libro que recoge artículos de docentes y alumnos, con reflexiones y experiencias de estos 25 años de Educación Permanente. Entre otros, destaca el escrito del profesor Ramón Jubera, quien se remonta a los antecesores del Programa de Educación de Adultos, que surgió para erradicar el analfabetismo, una lacra que entonces alcanzaba al 38,7% de la población mayor de 25 años y que ahora se ha reducido a cifras residuales que oscilan en el 3%, unos logros que propiciaron el reconocimiento de la Unesco, que premió el esfuerzo del colectivo que llevó adelante este programa. "Estos nutrientes (compromiso, crítica y esfuerzo), que a veces escaseaban, y teníamos que ingeniárnosla para alimentarlo, hicieron que el PEA tuviera una infancia robusta, lozana y alegre en cada una de sus actuaciones tanto espaciales como sociales, pues "juega con todos y todas sin exclusiones por razones económicas, sociales, de género, de raza...", narra Jubera, recordando los comiezos.

Como última reflexión, este profesor plantea que "es preciso adecuar la filosofía" de la Ley de Educación de Adultos del 90 a "una nueva etapa para que sirva de instrumento de cambio", pues "es preciso dotar al ser que nació ahora hace 25 años, de la alimentación correcta para que vuelva a recuperar su frescura y energía".